
El acuerdo de legislatura suscrito por el PSOE y Sumar es, por fin, una buena noticia, en el muy difĆcil camino de la investidura de Pedro SĆ”nchez.
Su contenido es muy amplio, diverso y ambicioso, muy superior cualitativamente al suscrito en el año 2019 entre Pedro SÔnchez y Pablo Iglesias. Aunque contiene aspectos mÔs puntuales y otros poco definidos, hay bastantes que trascienden del marco de una legislatura normal y que requerirÔn un pleno desarrollo en un horizonte temporal dilatado de al menos toda la presente década. Y sobre todo hay diversos anuncios de reformas legislativas que no van a ser fÔciles con la actual correlación de fuerzas parlamentarias, la ya anunciada poca colaboración de la derecha y la volatilidad de los apoyos de algunos de los posibles aliados de la investidura.
Dicho esto y partiendo de mi clara identificación con la propuesta de una nueva edición del gobierno de progreso, cuyo punto de partida evidentemente va a ser el acuerdo firmado por Pedro SÔnchez y Yolanda Diaz, no puedo dejar de referirme a importantes dudas sobre la viabilidad de bastantes de las medidas que se proponen y de algunos interrogantes sobre aspectos poco definidos o incluso algunas ausencias llamativas.
El gobierno de coalición progresista va a tener que trabajar mucho este Acuerdo, marcando prioridades y concretando calendarios
Los primeros capĆtulos del Acuerdo contienen un muy ambicioso objetivo de modernización de nuestro paĆs, en un contexto de desarrollo sostenible y activo frente al cambio climĆ”tico, continuando con algunas iniciativas tomadas en los Ćŗltimos aƱos, profundizando en las mismas y completĆ”ndolas con nuevas reformas. Y la pregunta que inmediatamente surge Āæes como se va a financiar todo esto?
Es cierto que hay medidas positivas en el Ć”mbito fiscal, que generarĆan nuevos ingresos fiscales, no muchos, pero si de cierta importancia. Pero no se si los asesores de ambos partidos han echado cuentas de la relación de gastos e ingresos en los que van a tener que moverse. Todo ello, sin entrar todavĆa en los numerosos aspectos de mejora y ampliación de las polĆticas de bienestar social que incluye el Pacto suscrito.
Por otra parte hay que tener muy presente que todo hace pensar que en los próximos aƱos la Unión Europea va a exigir la reducción del dĆ©ficit pĆŗblico y de manera especial a EspaƱa, y desde luego no va a dar facilidades para incrementar el gasto pĆŗblico como se ha hecho en los Ćŗltimos aƱos. Hay que tener en cuenta tambiĆ©n que la llegada de fondos europeos va a ser muy inferior a lo sucedido en la Ćŗltima legislatura. AsĆ que el nuevo gobierno de coalición debe ser muy cauto a la hora de adoptar compromisos que luego podrĆan ser difĆciles de cumplir.
AdemĆ”s las propuestas de modernización del tejido productivo y del sistema económico de nuestro paĆs exige contar con una istración PĆŗblica suficiente, Ć”gil y dinĆ”mica, ampliamente digitalizada y tecnificada, preparada para resolver en tiempo y forma las demandas de la ciudadanĆa y de los empresarios. Retos que afectan a la istración General del Estado, Autonómica y Local, algo que hoy lamentablemente estamos lejos de tener. Son escasos los avances en los Ćŗltimos aƱos en la reforma y modernización istrativa y ese objetivo no es algo que se consiga rĆ”pidamente. Y sin unas istraciones publicas adecuadas, a pleno rendimiento gestor y fiscalizador y con un personal formado suficientemente para dar respuestas rĆ”pidas y seguras, no serĆ” fĆ”cil apoyar e impulsar la modernización del sector privado como se recoge en el pacto.
La vicepresidenta CalviƱo y la ministra MarĆa JesĆŗs Montero estarĆ”n preparando ya el proyecto de Presupuestos para el aƱo 2024, para no perder nada de tiempo en la materialización del Acuerdo de gobierno de coalición
En tercer lugar me parece que a veces no se es muy coherente con el modelo de Estado que decimos defender y desarrollar y los instrumentos que ponemos en juego para ello. Buena parte de las propuestas de reforma y modernización exigen la estrecha colaboración, por no decir el pleno acuerdo, con las istraciones Autonómicas y tambiĆ©n con las Locales. En el Acuerdo firmado ese papel de cooperación y coordinación entre istraciones apenas estĆ” presente, salvo en aspectos del Ć”mbito social (en especial Sanidad, Dependencia o Servicios Sociales). Es de temer que las istraciones Autonómicas, mĆ”xime teniendo en cuenta la actual hegemonĆa de gobiernos de derecha o nacionalistas, no van a dar facilidades y van a exigir y yo dirĆa que con toda razón, protagonismo en el diseƱo, ejecución y seguimiento de las reformas y no ser meros actores secundarios de lo que les proponga la istración General del Estado.
Asà que sin financiación suficiente, sin unas istraciones Públicas preparadas y sin el Pacto entre las tres istraciones Públicas resulta muy complicado sacar adelante las propuestas de reforma y modernización, que en mi opinión son la parte mas importante e innovadora del Acuerdo.
Me resulta poco compresible la escasĆsima atención que se le da a nuestro Sistema Educativo desde la infancia a la Universidad
Hay interesantes iniciativas en materia de Agricultura, GanaderĆa, Pesca, polĆtica de agua, polĆtica forestal, Transportes, lucha contra la desertificación y los incendios forestalesā¦como tambiĆ©n en lo que respecta al apoyo a las necesidades de la llamada āEspaƱa vaciadaā, aunque de nuevo surgen las dudas sobre su efectiva aplicación y desarrollo sin nueva financiación y sin estrecha colaboración y cooperación entre las tres istraciones PĆŗblicas.
En otro orden de cosas me resulta poco compresible la escasĆsima atención que se le da a nuestro Sistema Educativo desde la infancia a la Universidad. El Ćŗnico compromiso mĆ”s concreto es el de la paulatina universalización de la atención de 0-3 aƱos (que por cierto requiere un sensible incremento de gasto pĆŗblico) que me parece bien como polĆtica de apoyo a las familias, pero los problemas del sistema educativo son otros y mucho mas graves y se sitĆŗan en los Colegios, Institutos, Formación Profesional y Universidad, con notables deficiencias tanto en equipamientos, profesorado y modernización de los planes y sistemas formativos.
Como también es muy sorprendente el tratamiento que se le da a la desastrosa situación actual del sistema judicial, siendo la primera medida que se contempla la normalización del Consejo General del Poder Judicial, algo imprescindible, pero muy insuficiente. AdemÔs de las reformas procedimentales de nuestro cuerpo normativo, sobre las que se pasa de puntillas, resulta inaplazable la mejora de los equipamientos de la istración de Justicia, el sensible aumento del conjunto de los profesionales y la adecuada dotación informÔtica del sistema.
Hay algunas medidas āestrellaā como la reducción de la jornada laboral o las limitaciones al uso del avión en recorridos con buena dotación ferroviaria, que habrĆ” que esperar cómo se concretan
En Sanidad, Servicios Sociales, Dependencia o Vivienda hay compromisos positivos, aunque algunos son excesivamente genĆ©ricos, seguramente porque avanzar en su concreción conllevarĆa explicar cómo se iban a financiar las mejoras de derechos, asĆ como concretar los marcos de cooperación entre istraciones. Por cierto resulta sorprendente la casi ausencia de medidas de prevención, tratamiento e inserción social de la discapacidad.
En Pensiones, que representa una parte sustancial del gasto público y mas del 10% del PIB, también se circula de puntillas, lo que encaja mal con los recados que nos estÔn mandando desde la Unión Europea, cada vez mÔs frecuentes y exigentes, de proceder a reformas del sistema, en dirección no precisamente expansiva del gasto.
En cuanto a las polĆticas de apoyo a los jóvenes, las que hay son positivas, aunque hay ausencias y sobre todo estĆ”n repartidas a lo largo del documento, por lo que pierden visibilidad y necesitarĆan una mayor prioridad.
Por otro lado es increĆble que no haya en las 48 paginas del Pacto ninguna referencia a la emigración en nuestro paĆs, tan solo una lĆnea en polĆtica de relaciones internacionales en relación con reformas de la legislación comunitaria. Yo creo que este tremendo olvido le va a hacer muy difĆcil ir a explicar el Pacto a los firmantes en determinadas Islas de nuestro PaĆs y en determinados barrios de nuestras ciudades.
La casi total ausencia de medidas en el Ć”mbito de Defensa y Seguridad, supongo yo que responde a no querer poner de relieve las diferencias que existen entre los dos socios de gobiernoā¦
Llama la atención que hay una cierta tendencia a crear nuevos órganos que ayuden, impulsen, controlen, evalĆŗen, etc. las nuevas polĆticas que se quieren impulsar. Puede estar bien, como instrumento de participación, coordinación y anĆ”lisis, pero seria de desear mayor transparencia en su futuro diseƱo, composición y funcionamiento y eso sĆ, ver los costes que ello conlleva.
Por Ćŗltimo, hay algunas medidas āestrellaā como la reducción de la jornada laboral o las limitaciones al uso del avión en recorridos con buena dotación ferroviaria, que habrĆ” que esperar cómo se concretan y tambiĆ©n estudiar las experiencias en ambos aspectos por ejemplo en Francia.
Pero en mi opinión el reto actual de la inmensa mayorĆa de los trabajadores de nuestro paĆs no es tanto reducir dos horas y media la jornada de trabajo (que a muchos se las cambiaran por horas extras), sino mejorar sus ingresos y el poder adquisitivo mediante mejores y mĆ”s generalizados convenios colectivos, con pactos de incrementos salariales a cambio de mejora y racionalización de la productividad.
Hay tambiĆ©n algunos interrogantes sobre cual va a ser la posición de Podemos, que en mi modesta opinión esta excesivamente marginado por Yolanda Diaz y su equipo. Porque una cosa es que sea ya insostenible la presencia de algunas ministras y otra que olvidemos que siguen representando una fuerza polĆtica necesaria para tener la mayorĆa en la investidura y las posteriores tramitaciones legislativas.
Como tambiĆ©n puede dar lugar a futuras tensiones las referencias muy explicitas a mejoras en la Comunidad Valenciana, supongo que exigidas por āCompromisā y que tal y como estĆ” el panorama polĆtico autonómico (con gobiernos del PP, del PSOE y de los nacionalistas vascos y catalanes rivalizando en demandas), van a preguntar Āæy de lo mĆo que hay?
En definitiva, el gobierno de coalición progresista va a tener que trabajar mucho este Acuerdo, marcando prioridades, concretando calendarios, aunque sean tentativos, buscando el consenso polĆtico, por supuesto tambiĆ©n con el PP, con las organizaciones sindicales y patronales, reconociendo el adecuado protagonismo a las otras istraciones PĆŗblicas. Y esto exige, por mucho que nos cueste, establecer otra forma de relación mĆ”s constructiva con el PP, para un ambicioso objetivo de modernización y cohesión social y territorial de EspaƱa.
En todo caso se supone que la vicepresidenta CalviƱo y la ministra MarĆa JesĆŗs Montero estarĆ”n preparando ya el proyecto de Presupuestos para el aƱo 2024, para no perder nada de tiempo en la materialización del Acuerdo de gobierno de coalición.
