
Los recortes presupuestarios estĆ”n haciendo mella en todos los servicios sanitarios pĆŗblicos. Para poder conocer su impacto concreto en la Atención Primaria de Madrid, desde la Asociación para la Defensa de la Sanidad PĆŗblica hemos realizado una encuesta en 94 centros de salud para conocer la situación en cuanto a personal, recursos, atención a la ciudadanĆa, derivaciones a centros privados y demoras.
Los resultados del estudio evidencian que los recortes estÔn afectando de manera importante a la Atención Primaria en Madrid. Los efectos negativos mÔs importantes son:
-En cuanto a personal: las reducciones de jornadas y las bajas por enfermedad no son cubiertas en la mayorĆa de los casos, en mas del 60%, las bajas por enfermedad nunca antes de los 15 dĆas (lo que hace que no se cubran las bajas de corta duración que son las mas frecuentes) lo que produce un aumento de la presión asistencial que atienden los profesionales, con los negativos efectos que conlleva (menos tiempo por paciente, mas demoras, menor calidad de la atención, mayor probabilidad de errores, etc). Por otro lado conlleva tambiĆ©n el abandono de las actividades no meramente asistenciales, abandonando las tareas de prevención y promoción que son esenciales en la Atención primaria.
-Se ha detectado una disminución de los recursos (vacunas, medicamentos, material fungible, etc) en la mayorĆa de los centros (mas del 50% de los mismos), solo en cuanto a los aparatos de electromedicina se seƱalo una dotación suficiente, si bien en la mayorĆa de los casos (58,7%) no se encontraban en buen estado y solo se reponĆan en un tercio de los casos.
-En cuanto a la atención a la ciudadanĆa, se han evidenciado modificaciones en los protocolos de crónicos en la mayorĆa de los centros, generalmente ampliando los intervalos de los controles y modificaciones en las derivaciones a atención especializada. El suministro de material y medicamentos ha sufrido un recorte en la mayorĆa de los centros, asĆ como la dotación de vacunas y de suministros para enfermos diabĆ©ticos. La cartera de servicios solo se ha reducido en un 6,18% de los casos y no se han detectado exclusiones salvo en el caso de los inmigrantes no regularizados que se siguen atendiendo en muchos casos.
-La mayorĆa de los centros detectan derivaciones de los enfermos para pruebas diagnosticas e intervenciones quirĆŗrgicas a los centros privados (67,4% y 58,7% respectivamente), derivaciones que les son comunicadas por los propios enfermos, lo que vuelve a evidenciar que estas derivaciones se producen directamente desde los ācall centerā, sin informar a los profesionales.
-La demora para consultas de medicina general, enfermerĆa y tĆ©cnicas es elevada aunque con unas diferencias muy marcadas entre unos centros y otros. Casi la mitad de los centros (45,7%) tienen una demora superior a 2 dĆas para medicina general lo que es inaceptable y favorece claramente la utilización de otros circuitos asistenciales (urgencias, etc). Lo mismo puede decirse en cuanto a la consulta de enfermerĆa y realización de tĆ©cnicas (superior a 2 dĆas en el 30% de los casos). Se detectaron demoras mĆ”ximas muy elevadas (7 dĆas para medicina general, 11 para consulta de enfermerĆa, 4 para pediatrĆa y 10 para realización de tĆ©cnicas).
-Por fin merece la pena resaltar las grandes disparidades en cuanto a los recortes que sufren los distintos centros de salud, incluso dentro de las mismos distritos (que vienen a suplir organizativamente a las antiguas Ć”reas) lo que supone un perjuicio claro para la ciudadanĆa y un factor de inequidad que merece la pena resaltar.
En resumen, los recortes presupuestarios estĆ”n afectando de manera importante a la Atención Primaria, en cuanto al personal, a los recursos que utiliza, a la atención a los enfermos y a los aumentos de las demoras, lo que resulta contradictorio porque en un momento de crisis es la que puede dar a la mayorĆa de la población una atención sanitaria de calidad a bajo coste.
Esta situación responde claramente a una estrategia del PP en la Sanidad PĆŗblica madrileƱa: se lleva a cabo un deterioro intencionado de su funcionamiento para asĆ justificar su privatización. Los resultados, con un empeoramiento de la salud en la población, muy probablemente no se harĆ”n esperar si no se produce una rectificación de esta polĆtica de desmantelamiento y deterioro de los servicios pĆŗblicos bĆ”sicos.
Sergio FernÔndez Ruiz, Vicepresidente de la Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública de Madrid.